(Por J. Navarro)
Situación: Autovía A3, km 124 dirección Madrid – Albacete.
Un restaurante «de carretera» que podría ser de los mejores en cualquier ciudad.
Este es un restaurante muy bien conocido por todos los que más o menos frecuentemente pasamos por allí. Y, ¿por qué es bien conocido?
En primer lugar porque es muy cómodo. Esta en la cuneta derecha en dirección a Albacete, se aparca muy fácilmente y no se separa uno demasiado de la carretera.
En segundo lugar, porque uno descubre una barra de raciones y una carta de restaurante con muy buena pinta y mucho mejor calidad de la que uno espera encontrar «en un restaurante de carretera».
En tercer lugar, porque, una vez prueba lo que ha pedido se convence de que todo es de primera calidad, que esta hecho en su punto y, no menos importante, que se lo han servido rápidamente, condición importante «en un restaurante de carretera».
En cuarto lugar porque, contra lo que podría parecer dada la calidad de lo que hemos tomado, el precio es mas que correcto, lo que, dadas las circunstancias, es muy de agradecer.
En quinto lugar, porque dentro, además de barra y restaurante, tienen una tienda de exquisiteces procedentes de media España y de calidad inmejorable, atendida por la sonrisa más amable de la provincia de Cuenca. Donde encontraremos desde un tentenpie para llevarnos de urgencia hasta munición para hacerse con una escogida factura de aperitivos y «lunch» allí donde vayamos.
Y en sexto lugar, porque es parada y fonda obligada de músicos, actores, deportistas y hombres de TV en gira. Y de ello dan buena cuenta la cantidad de fotos que cubren las paredes en las que, personajes reconocibles y reconocidos junto a responsables del restaurante nos sonríen con cara de «me han pillado…» y, entre ellos, muchos socios de PMP, (Micky entre otros muchos) como no podía ser menos.
De lo que doy fe yo mismo, que paso por ese «santo» lugar muchas veces al año.